Hacer yoga marca la diferencia entre un cuerpo sano y uno enfermo, entre una mente estresada y una relajada, entre un ser rígido y otro flexible, entre una mueca de dolor o una sonrisa.
Estas afirmaciones anteriores son el resultado de multitud de estudios llevados a cabo por diferentes doctores, universidades y centros de investigación en EEUU e India. Nosotros hemos elegido para este artículo un libro del Dr. Timothy McCall (Yoga y medicina. Prescripción del yoga para la salud. Editorial Paidotribo. Badalona, 2010) Es una verdadera lástima que la comunidad médica no esté al tanto de los verdaderos efectos del yoga en el cuerpo y la mente, más allá de la flexibilidad y la relajación.
- Reduce el estrés, lo que contribuye al control de multitud de enfermedades y afecciones del cuerpo. Disminuye los niveles de la hormona del estrés cortisol, relacionada con la subida del azúcar en sangre en ayunas, elevada presión sanguínea, triglicéridos altos, resistencia a la insulina, aumento de peso corporal y de grasa intraabdominal.
- Diferentes estudios científicos han demostrado su eficacia en la reducción del dolor de espalda (McCall: 175). Un estudio realizado con pacientes con dolor crónico en la zona lumbar que asistían a sesiones de yoga Iyengar, mostró que el grupo de yoga experimentó una reducción del dolor de un 64%.
- Es beneficioso para reducir la depresión. La práctica regular de yoga mejora el ánimo, la calidad del sueño, los síntomas estomacales, y reduce la ansiedad.
- Es de gran ayuda en el control de la diabetes (McCall: 258-259). En las últimas décadas se han realizado diversos estudios sobre los efectos del yoga en pacientes con diabetes y todos ellos han demostrado que el yoga reduce los niveles de azúcar en sangre (glucemia), en muchos de los casos pudieron reducir e incluso dejar totalmente la medicación.
- Resulta ser una herramienta muy útil en la reducción del dolor (cabeza, espalda, fibromialgia...) en muchos casos incluso más eficaz que la medicación.
- Mejora la función pulmonar, ampliando la capacidad respiratoria y haciendo que llegue más oxígeno a todo el organismo.
- Es beneficioso para afecciones cardíacas, ya que es capaz de reducir factores de riesgo como la presión sanguínea, los niveles de colesterol y el peso corporal.
- El savasana, la meditación y diversas técnicas de respiración propias del yoga hacen descender la presión sanguínea.
- Tanto el yoga como la meditación reducen la ansiedad y los ataques de pánico.
- Ayuda a disminuir los síntomas producidos por la artrosis y artritis reumatoide.
- Reduce el insomnio y mejora la calidad del sueño.
- Ayuda a reducir el sobrepeso y la obesidad.
Estas afirmaciones anteriores son el resultado de multitud de estudios llevados a cabo por diferentes doctores, universidades y centros de investigación en EEUU e India. Nosotros hemos elegido para este artículo un libro del Dr. Timothy McCall (Yoga y medicina. Prescripción del yoga para la salud. Editorial Paidotribo. Badalona, 2010) Es una verdadera lástima que la comunidad médica no esté al tanto de los verdaderos efectos del yoga en el cuerpo y la mente, más allá de la flexibilidad y la relajación.