España ha caído en tan solo tres años de ocupar el puesto 11 en el ranking mundial de países por Igualdad de Género en 2010 al puesto 30 en 2013, según el ranking que viene elaborando el Foro Económico Mundial desde el año 2006.
En 2013, las españolas disfrutaron de menos cuotas de igualdad que las mujeres de Mozambique, Burundi o Lesoto, entre otras.
No es que hubiésemos llegado a una situación de igualdad, pero en España se habían hecho progresos, aunque quedaban asignaturas pendientes, como la igualdad de género en ciencia, en el que queda mucho camino por recorrer. En mi propia institución, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC, provoca sonrojo contemplar la galería de retratos de presidentes, en la Sala de Juntas de Presidencia, sin ni una única mujer. Espero que la próxima Presidenta del CSIC sea una de las muchas investigadoras excelentes de las que trabajan en España.
La aprobación de una ley del aborto anunciada por el Gobierno, incluso con modificaciones de los elementos más crueles que incluye el proyecto, supondrá el hundimiento de la igualdad de género al tratar a las mujeres como dependientes irresponsables.
La pérdida de los logros en igualdad de género nos vuelve a épocas oscuras en las que las mujeres, nuestras madres, hermanas, hijas y amigas, sufrían una desigualdad cruel.
Ese sufrimiento se expresa muchas veces en su forma mas salvaje de violencia de género, que las mujeres sufren desde niñas, que son a quienes afecta la mayor parte de desapariciones y asesinatos de menores.
Coincido con el Gobierno en el deseo de que 2014 sea el año de la recuperación, pero esa recuperación ha de iniciarse por la recuperación de los derechos robados.
Este 2014 ha de marcar el inicio de la recuperación de la igualdad de género perdida de forma abrupta en tan solo dos años, con la determinación de que el PP no pueda arrastrar a las mujeres, con su nueva propuesta de ley del aborto, a la oscuridad de la que las habíamos rescatado.
En 2013, las españolas disfrutaron de menos cuotas de igualdad que las mujeres de Mozambique, Burundi o Lesoto, entre otras.
No es que hubiésemos llegado a una situación de igualdad, pero en España se habían hecho progresos, aunque quedaban asignaturas pendientes, como la igualdad de género en ciencia, en el que queda mucho camino por recorrer. En mi propia institución, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC, provoca sonrojo contemplar la galería de retratos de presidentes, en la Sala de Juntas de Presidencia, sin ni una única mujer. Espero que la próxima Presidenta del CSIC sea una de las muchas investigadoras excelentes de las que trabajan en España.
La aprobación de una ley del aborto anunciada por el Gobierno, incluso con modificaciones de los elementos más crueles que incluye el proyecto, supondrá el hundimiento de la igualdad de género al tratar a las mujeres como dependientes irresponsables.
La pérdida de los logros en igualdad de género nos vuelve a épocas oscuras en las que las mujeres, nuestras madres, hermanas, hijas y amigas, sufrían una desigualdad cruel.
Ese sufrimiento se expresa muchas veces en su forma mas salvaje de violencia de género, que las mujeres sufren desde niñas, que son a quienes afecta la mayor parte de desapariciones y asesinatos de menores.
Coincido con el Gobierno en el deseo de que 2014 sea el año de la recuperación, pero esa recuperación ha de iniciarse por la recuperación de los derechos robados.
Este 2014 ha de marcar el inicio de la recuperación de la igualdad de género perdida de forma abrupta en tan solo dos años, con la determinación de que el PP no pueda arrastrar a las mujeres, con su nueva propuesta de ley del aborto, a la oscuridad de la que las habíamos rescatado.