La magia no muere

No hay que ser un gran conocedor ni un especialista de flamenco (yo no lo soy) para comprender lo que es Paco de Lucía.

Su incomparable, deslumbrante, fabulosa e inalcanzable técnica con la guitarra es lo menos importante de todo.

Él es PURA MAGIA.

Yo vengo del mundo del Rock, y para nosotros está en el Olimpo, junto a Jimi Hendrix, Eric Clapton y Jimi Page.

Su estilo único y personal me transporta a lugares desconocidos cada vez que lo oigo.

A sitios parecidos a los que me llevan Miles Davies o Keith Richards.

Son zonas donde la inspiración es pura y elevada.

Paisajes donde vas con Picasso o Buñuel.

Pero además Paco, como otros grandes creadores, trasciende su estilo.

A mí me da la sensación de que podría contar lo mismo haciendo cualquier otra cosa.

Hace pocos meses mi amiga Mariana me llevó a verlo en el teatro Gran Rex en Buenos Aires.

Fue otra de esas grandes noches.

Después en camerinos era tierno y campechano.

Me dijo "de algún lado te conozco" y yo me reí y le dije: "Quizás del colegio de curas".

Hay gente que nunca debería morir.

O por lo menos ¡no TAN PRONTO!