Qué más da que llueva o no, que la humedad nos encrespe el pelo o nos lo chafe, que haga calor por encima de nuestras posibilidades, porque el bochorno lo tenemos igualmente garantizado por las fechas en que estamos o por el gobierno que nos representa (¿?). Según Montoro "El pueblo español cuando se levanta, empieza a asombrar al mundo y a llamar su atención"; y no parece que sea porque se haya pasado con la sangría precisamente, que haga que se tambalee por ebrio o por gusto, sino por el progreso que está experimentando, la satisfacción que siente y el asombro que genera por cumplir con los designios sacrosantos del euro y de la UE. Asombro peripatético debe ser y por supuesto ajeno al ciudadano, ¿o alguien cree que más allá de Nadal o algún reputado científico, por supuesto pseudoexilado, alguno de nosotros despierta asombro? Más bien condolencia: lo que fuiste y lo que eres Clase Media. Gracias PP.
Para incidir aún más en el bochorno de la estación, faltaba la aprobación unilateral en el último Consejo de Ministros, amparados en su mayoría absoluta, casi con nocturnidad y alevosía, del decreto de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficacia. Ni las protestas, ni la indignación del resto de grupos parlamentarios e incluso de algunos miembros del PP, por la inexistencia de debate parlamentario previo, ha hecho desviarse al Gobierno un ápice del talante arrogante con que funciona; y eso que el decreto modifica la friolera de 26 leyes de calado. Ahí es nada la soberbia marca de la casa.
También produce tanto bochorno como un 15 de agosto a las 3 de la tarde, que a estas alturas todos los partidos políticos y cualquier centro de poder imaginable, desde ayuntamientos a ministerios, se abran ahora a la participación ciudadana e incluso deleguen en ella ciertos aspectos de decisión. Es lo que ha traído consigo el huracán Podemos y la sensación de que el ciudadano puede cuando se une y organiza. Al menos así lo ha percibido el Poder. Ahora todos quieren ser transparentes; ahora todos desean procesos participativos donde el ciudadano y no el político sea el protagonista, y se entiende como prioritario que todo cambie en este sentido... para que todo siga igual.
Qué sangría tan grande en la confianza de la gente. Qué sangría tan despiadada que en lugar de ponernos contentos nos ha puesto dolor de cabeza y mala leche. Ni con una transfusión de transparencia y buenas prácticas nos recuperan. Tal vez con ibuprofeno, si entre sus efectos secundarios se encuentra la pérdida de memoria.
Menos mal que siempre nos quedará París y sobre todo sangrías que se adaptan perfectamente a las preferencias del ciudadano y sus circunstancias. Unas sangrías, estas sí, elegidas en libertad, voluntariamente y deseadas, y no las sangrías que estas sanguijuelas, sin vaso y a fuerza de embudo, nos han obligado a tragar.
Aquí te presento tres tipos diferentes para que las adaptes al momento y a tu estado de ánimo. La sangría es la paella de los cócteles patrios, nuestro combinado más conocido y el que nos identifica; ese que de verdad asombra al mundo y llama la atención y que realmente levanta al pueblo español y a quien lo prueba, pero de alegría.
Una recomendación, que no por obvia hay que pasar por alto: a mayor calidad de los vinos, licores e ingredientes que utilicemos, mucho más buena estará. Lo digo para aquellos que reservan los peores vinos para echárselos a la sangría. A la sangría, como a cualquier combinado que se precie, no se le echa nada, se hace con cariño y con mucho respeto.
SANGRÍA 'HAPPY FAMILY'
Si tu momento es familiar o entre amigos, en la playa, el apartamento, el monte o la casa de pueblo, ninguna tan flexible, bizarra, auténtica y alimenticia como ésta.
Necesitarás:
- 1l de vino, ½ de gaseosa, 5 cucharadas de azúcar, un chorrito de coñac, otro de ginebra, abundante hielo, una punta de canela y nuez moscada, 2 limones, 1 naranja, 2 melocotones y un plátano.
Elaboración:
- Verter en una jarra el vino junto al zumo de uno de los limones, los chorritos de licor, el azúcar y las especias. Remover.
- Cortar las frutas, incluidos los cítricos, en trocitos pequeños e incorporar a la jarra. Remover bien y reservar en la nevera durante 2h aproximadamente.
- A la hora de servir, incorporamos los cubitos y la gaseosa para que no se aguache
- Beber en vaso grande y ancho.
Repetir los pasos y las cantidades tantas veces como sea necesario o precise la velada.
SANGRÍA 'LOVE STORY'
Si lo que quieres es disfrutar de una cena romántica o culminar una velada de amor a la luz de las velas y mecidos por los reflejos carmesí de este combinado, sin duda ésta es la opción acertada.
Necesitas:
- 1 botella de cava rosado (brut nature, mejor, aunque en cierta forma es indistinto pues le añadirás azúcar), ¼ de vino blanco, 3 cucharadas de azúcar, 1 naranja sanguina, 100gr de fresas, 100gr de cerezas, 100gr de frambuesas y moras, abundante hielo.
Elaboración:
- Corta la naranja, exprime media y remueve junto al vino blanco frío y el azúcar.
- Corta en trozos las fresas, la otra mitad de la naranja con la cáscara y las cerezas por la mitad y deshuesadas, añadiendo el resto de frutos rojos. Remover y añadir el hielo.
- Reservar en la nevera hasta la hora de servir, cuando añadiremos con cuidado el cava bien frío para evitar que se aguache.
Un trocito de fresa o naranja colocado en el borde del vaso le dará un toque de distinción irresistible.
SANGRÍA 'CELEBRATION'
Si lo que estás es de aniversario, cumpleaños, celebras el regreso de alguien por navidad o por fin ha habido un cambio de Gobierno, tu opción más acertada es, sin dudarlo, la siguiente.
Necesitarás:
- 1 botella de cava brut nature, ¼ de vino blanco, un chorrito de cointreau, 3 cucharadas de azúcar (ó 4, va a gustos) 3 naranjas, 2 limones, 1 melocotón y mucho hielo.
Elaboración:
- Exprime 2 naranjas y un limón y en una jarra mezcla con el azúcar, el vino, el chorrito de cointreau y remueve.
- Corta el resto de la fruta, añádela a la jarra junto al hielo y deja en la nevera hasta el momento de servir, cuando añadiremos el cava bien frío removiendo el conjunto con delicadeza
Y para acompañarlas qué mejor plato que el siguiente: Cornetes de hummus de berenjena con queso feta, los Cornetes anti-bochorno que combaten el calor y el humo de la recuperación económica que con tanta obstinación nos vende el PP. Cornetes y sangría, la combinación letal contra la canícula y el engaño, que llevará a todos a la mesa a toque de corneta, en cuanto intuyan que por fin está dispuesta.
Que los disfrutes.
NECESITARÁS (para 4 personas)
- 1 Berenjena gordita.
- 1 cucharada de tahina.
- 1 diente de ajo.
- 1 limón (el zumo).
- Sal.
- Pimienta.
- Comino.
- Pimentón.
- 3 cucharadas aproximadamente de aceite de oliva virgen extra.
- 8 rebanadas de pan de molde sin bordes.
- 8 trocitos alargados de queso de Feta
ELABORACIÓN
- Corta la berenjena a lo largo, hazle unos cortes en forma de rejilla, salpimienta y échale unas gotas de aceite. Tápala e introduce en el microondas a potencia máxima durante 10' aproximadamente o hasta que estén hechas (pincha y comprueba).
- Pela, quítale la raíz y corta muy fino el ajo.
- Cuando esté fría, quita la piel de la berenjena y tritura la carne con el tenedor para que quede grumosa.
- Introduce en el vaso picador un par de cucharadas de berenjena y el resto de ingredientes menos el pimentón (especias y sal al gusto, ve probando) y bate para que todos los ingredientes se mezclen y sobre todo no queden trozos de ajo grandes. Mezcla con el resto de la berenjena con el tenedor para que el sabor se integre en el conjunto. Guarda en la nevera hasta la hora de servir.
- Con el rodillo de amasar extiende cada una de las rebanadas de pan de molde. Envuelve un molde cónico para hacer cucuruchos con cada una de ellas cuidando que los bordes queden pegados (humedécelos con agua y listo). Mete en el horno en la función gril hasta que se doren.
- Emplatado: Introduce en cada cornete una tira de queso de feta y rellena con hummus de berenjena. Espolvorea de pimentón dulce de la Vera.
- Umm, Sencillo, riquísimo, fácil de comer y espectacular.
NOTA
Si no quieres marearte con los cornetes, sirve el hummus en una cazuelita o plato y espolvoréalo con pimentón, añadiéndole una cucharada de aceite por encima. Sirve el queso aparte y acompaña con triángulos de pan de pita.
Esta de puro vicio también como acompañamiento de pescados y carne.
MÚSICA PARA ACOMPAÑAR
Para la elaboración: Aint't no sunshine, Michael Jackson.
Para la degustación: Use me, Mick Jagger & Lenny Kravitz
VINO RECOMENDADO
Cualquiera de las sangrías sugeridas se convertirá en el matrimonio perfecto de esta receta.
DÓNDE COMER
Ya lo has visto: en familia, con amigos, en la playa, en el apartamento, en el pueblo, con pareja, sin ella... Es una combinación la de este hummus y la sangría tan versátil que no tendrás ningún problema en encontrar la forma y el momento más adecuados para disfrutar con ella.
QUÉ HACER PARA COMPENSAR LAS CALORÍAS
¿En veranito y con una sangría en la mano y me lo preguntas? Pero bueno, vete a la playa y disfruta, y por encima de cualquier cosa olvídate de todo, que la vida es muy bonita y hay que disfrutarla.