Millones de personas de personas en el mundo fuman tabaco. Y, aunque varias manifiestan que fumar les da placer, la mayoría reconoce que el tabaco es malo para su salud. Todos los fumadores, en algún momento se plantean dejar el hábito, y realmente es una situación compleja y difícil. Ahora bien, ¿ha llegado la solución? ¿Será la citisina la solución para dejar de fumar?
Es masivamente conocido que el tabaco es perjudicial para la salud, causando diferentes tipos de cáncer, el más frecuente el de pulmón, y otras enfermedades, como puede ser la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), que destruyen este órgano, imposibilitando su función primordial, que es oxigenar la sangre. Además, también daña los vasos sanguíneos, y es un factor de riesgo clave para el infarto de corazón y el accidente cerebrovascular (ACV), entre tantas otras enfermedades. En la actualidad, no hay ninguna duda que el tabaco mata.
Según los datos estadísticos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de marzo de 2013, las cifras son verdaderamente impactantes: el tabaco mata hasta al 50% de sus consumidores. Actualmente, es responsable de la muerte anual de 6 millones de personas a nivel mundial, de las cuales aproximadamente 600.000 son fumadores pasivos.
¿Qué es la citisina?
La citisina es una sustancia que está presente de manera natural en plantas de la familia Fabaceae. Aunque está catalogada como una sustancia tóxica -ya que altas dosis puede interferir en la respiración, e incluso causar la muerte-, hace años que se estudian sus propiedades como un tratamiento efectivo para dejar de fumar.
Recientemente, el 18 de diciembre de 2014 se publicó un estudio que demuestra que la citisina es efectiva para dejar de fumar. En Nueva Zelanda se estudió a 1310 fumadores adultos que tenían ganas de dejar de fumar. Al primer mes de seguimiento se demostró que el 40% de los participantes que recibían citisina dejaron de fumar, en comparación con el 31% que utilizaron los parches de nicotina. La citisina fue mejor que la terapia de reemplazo de nicotina a la hora de favorecer la abstinencia continua (período de tiempo sin fumar) cuando se analizaron sus efectos a los 7 días, 2 meses y 6 meses de dejar de fumar. Aunque también es cierto que la personas que usaron citisina tuvieron efectos adversos menores, como náuseas, vómitos y alteraciones para dormir.
La citisina es un producto relativamente desconocido afuera de Europa del Este donde, según algunos informes, se utiliza exitosamente con este propósito desde hace casi 50 años. Y, además de ser efectiva a nivel terapéutico, tiene otra gran ventaja: su bajo costo. 25 días de tratamiento con citisina tiene un costo 3 veces que las 8-10 semanas necesarias de tratamiento con la terapia de reemplazo de nicotina (parches cutáneos, chicles o aerosol nasal).
¿Qué rol juegan nuestros genes en la adicción al tabaco?
Alteraciones (mutaciones) del gen DRD2 localizado en el cromosoma 11 (11q) estarían presentes en personas que tienen una adicción al tabaco. El gen DRD2 tiene la información para la síntesis de un receptor de dopamina, el cual es importante en el mecanismo a nivel cerebral de la sensación de recompensa/placer, que puede llegar a propiciar un mayor consumo y, a largo plazo, adicción a dicha sustancia.
¿Por qué la citisina sería una buena opción para dejar el vicio?
Es muy difícil dejar de fumar. Algunos usan ese momento de "fumarse un placer" por placer. Otros, para acompañar un trago en una reunión con amigos. Otros, como un recreo de la realidad, mientras que otros, para calmar un momento de ansiedad/miedo. Se entiende perfectamente que es complejo, pero verdaderamente es importante intentar dejar el cigarrillo.
Algunas personas recurren al médico para hacer un tratamiento, otras acuden a un psicólogo, algunas, a sesiones de hipnosis o láser, mientras que varias deciden recurrir a los parches de nicotina. Lo que además hay que decir es que los tratamientos son muy costosos, incluso más caros que el precio de los paquetes de cigarrillos. Generalmente, cuando puedo con amigas o amigos, insisto que, aunque sea difícil, vale el esfuerzo hacerlo.
Desde hace años, varios grupos de investigación han estudiado el efecto de la citisina a la hora de dejar de fumar. Y cada vez está más demostrada su capacidad para ayudar a dejar de consumir esta sustancia tan destructiva como es el tabaco.
Lo interesante es que la citisina, además de ser aparentemente la más efectiva en este tratamiento, también sería la opción de menor costo. Estos recientes descubrimientos demuestran que la combinación de una terapia psicológica asociada con el uso de citisina es la mejor opción para lograr conseguir este gran objetivo.
Es una muy buena noticia para esos millones de fumadores que realmente quieren dejar de fumar.
Es masivamente conocido que el tabaco es perjudicial para la salud, causando diferentes tipos de cáncer, el más frecuente el de pulmón, y otras enfermedades, como puede ser la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), que destruyen este órgano, imposibilitando su función primordial, que es oxigenar la sangre. Además, también daña los vasos sanguíneos, y es un factor de riesgo clave para el infarto de corazón y el accidente cerebrovascular (ACV), entre tantas otras enfermedades. En la actualidad, no hay ninguna duda que el tabaco mata.
Según los datos estadísticos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de marzo de 2013, las cifras son verdaderamente impactantes: el tabaco mata hasta al 50% de sus consumidores. Actualmente, es responsable de la muerte anual de 6 millones de personas a nivel mundial, de las cuales aproximadamente 600.000 son fumadores pasivos.
¿Qué es la citisina?
La citisina es una sustancia que está presente de manera natural en plantas de la familia Fabaceae. Aunque está catalogada como una sustancia tóxica -ya que altas dosis puede interferir en la respiración, e incluso causar la muerte-, hace años que se estudian sus propiedades como un tratamiento efectivo para dejar de fumar.
Recientemente, el 18 de diciembre de 2014 se publicó un estudio que demuestra que la citisina es efectiva para dejar de fumar. En Nueva Zelanda se estudió a 1310 fumadores adultos que tenían ganas de dejar de fumar. Al primer mes de seguimiento se demostró que el 40% de los participantes que recibían citisina dejaron de fumar, en comparación con el 31% que utilizaron los parches de nicotina. La citisina fue mejor que la terapia de reemplazo de nicotina a la hora de favorecer la abstinencia continua (período de tiempo sin fumar) cuando se analizaron sus efectos a los 7 días, 2 meses y 6 meses de dejar de fumar. Aunque también es cierto que la personas que usaron citisina tuvieron efectos adversos menores, como náuseas, vómitos y alteraciones para dormir.
La citisina es un producto relativamente desconocido afuera de Europa del Este donde, según algunos informes, se utiliza exitosamente con este propósito desde hace casi 50 años. Y, además de ser efectiva a nivel terapéutico, tiene otra gran ventaja: su bajo costo. 25 días de tratamiento con citisina tiene un costo 3 veces que las 8-10 semanas necesarias de tratamiento con la terapia de reemplazo de nicotina (parches cutáneos, chicles o aerosol nasal).
¿Qué rol juegan nuestros genes en la adicción al tabaco?
Alteraciones (mutaciones) del gen DRD2 localizado en el cromosoma 11 (11q) estarían presentes en personas que tienen una adicción al tabaco. El gen DRD2 tiene la información para la síntesis de un receptor de dopamina, el cual es importante en el mecanismo a nivel cerebral de la sensación de recompensa/placer, que puede llegar a propiciar un mayor consumo y, a largo plazo, adicción a dicha sustancia.
¿Por qué la citisina sería una buena opción para dejar el vicio?
Es muy difícil dejar de fumar. Algunos usan ese momento de "fumarse un placer" por placer. Otros, para acompañar un trago en una reunión con amigos. Otros, como un recreo de la realidad, mientras que otros, para calmar un momento de ansiedad/miedo. Se entiende perfectamente que es complejo, pero verdaderamente es importante intentar dejar el cigarrillo.
Algunas personas recurren al médico para hacer un tratamiento, otras acuden a un psicólogo, algunas, a sesiones de hipnosis o láser, mientras que varias deciden recurrir a los parches de nicotina. Lo que además hay que decir es que los tratamientos son muy costosos, incluso más caros que el precio de los paquetes de cigarrillos. Generalmente, cuando puedo con amigas o amigos, insisto que, aunque sea difícil, vale el esfuerzo hacerlo.
Desde hace años, varios grupos de investigación han estudiado el efecto de la citisina a la hora de dejar de fumar. Y cada vez está más demostrada su capacidad para ayudar a dejar de consumir esta sustancia tan destructiva como es el tabaco.
Lo interesante es que la citisina, además de ser aparentemente la más efectiva en este tratamiento, también sería la opción de menor costo. Estos recientes descubrimientos demuestran que la combinación de una terapia psicológica asociada con el uso de citisina es la mejor opción para lograr conseguir este gran objetivo.
Es una muy buena noticia para esos millones de fumadores que realmente quieren dejar de fumar.
Si te interesan estos temas, puedes leer mi nuevo libro Genética. Cómo puede cambiar nuestras vidas (Paidós).