Soy un bebé de 10 meses y te escribo porque sé que mi madre ha enviado una Lista de Navidad por mí, y su lista no incluye ni de lejos lo que yo quiero. Me da exactamente igual que me regales tazas apilables.
Ya sé que me puedes salir con la típica broma sobre los bebés de 10 meses y que con regalarnos cajas y papel de regalo ya somos felices. Touché, Papá Noel, touché. Claro que quiero esas dos cosas. Pero hay otras que también me encantaría que me trajeses.
Te adjunto mi lista. Que tengas muy felices fiestas.
-Bebé de 10 meses.
La lista completa de lo que quiero por Navidad
Querido Papá Noel, para estas Navidades me gustaría que me trajeses esto:
1. Este cable de portátil
Quiero este cable de ordenador portátil más que nada en el mundo. Por favor. También quiero la regleta con el botón naranja de encendido y apagado y el otro cable con la etiqueta blanca (el que no está conectado al ordenador). En realidad me conformaría con un puñado de cables, en general, pero me gustan especialmente estos que están debajo de la mesa de mi madre, al lado del aparato del aire acondicionado (cuyo cable también quiero).
2. Este centro de actividades montado en la pared.
No tengo ni idea de por qué mi madre no me deja jugar con esta cosa, porque claramente es un juguete para niños. Me gustaría uno para mi habitación.
3. Llaves
Me encantaría un juego de llaves. Para comérmelo, claro. Solo valen llaves de metal. Por favor, no me compres de las de plástico. No soy idiota. Sé que las llaves de plástico no son llaves de verdad.
4. Las gafas de la gente
Las cojo de las caras de todas las personas que conozco, solo para plantarles mis huellas dactilares y para que el dueño pida que se las devuelva. Me encantaría que me trajeses un par para mí. Este regalo también será para comérmelo.
5. El contenido de esta cosa
Me encantaría ver en el suelo el contenido de esta cosa, especialmente el algodón usado y mojado, y trozos de hilo dental. Si prefieres coger el contenido y transferirlo a mi calcetín de la chimenea, también vale.
6. Un puñado de pelos de perro
Esto es lo mejor del mundo. Yo intento tirar del pelo pero el perro no para de moverse y la extracción es difícil. Lo que más me gusta es metérmelo en la boca y darme cuenta inmediatamente de que no quería tenerlo en la boca.
7. El agujero en la tarima del pasillo
Esto es un dilema existencial muy extraño. Me paso horas observando este agujero y tocándolo con los dedos. Sé que no puedo tener un agujero, porque un agujero no es algo que se pueda tener. Un agujero es ausencia. Y aún así esto se supone que es una lista de cosas que quiero, y quiero este agujero con la misma intensidad con que Gandhi quería la paz. De la misma forma en que el perro quiere lamerme la cara. Del mismo modo en que mi madre desea que deje de cogerle las gafas.
8. Esto, que está por toda la casa
No tengo ni idea de qué es esto. Solo sé que lo quiero tener en las manos y en cuanto lo hago y empiezo a disfrutar de su dulce y delicada suavidad mi madre llega corriendo gritando cosas como "DEJA DE TOCAR ESO, ¿CUÁNTAS VECES TENGO QUE BARRER ESTE P*#O PASILLO?"
9. La comida del perro
Cada vez que me acerco a esto, alguien me aparta. Si no quieren que me lo coma, ¿por qué está en el suelo?
10. Uno de estos
No tengo ni idea de qué hace esto, pero está claro que tiene que ser divertido porque mi madre no deja de mirarlo ni un minuto.
11. Horquillas
¡Son mis favoritas! Si me dieran un céntimo por cada horquilla que me he encontrado en el suelo habría duplicado el número de cosas pequeñas de metal que me caben en la boca, porque por alguna razón, también me encantan los céntimos.
Este post se publicó originalmente en el blog de humor y paternidad The Ugly Volvo.